Situada en un valle junto al río Pisuerga, sus orígenes pueden estar en una villa romana, aunque las primeras referencias documentales se remontan al siglo IX. En el siglo XVIII se reconstruyó la iglesia parroquial de San Martín sobre la fábrica de otra más antigua, probablemente gótica. En el siglo XIX, a parte de esta iglesia parroquial, figuran otros templos como la ermita del Espíritu Santo, que todavía puede verse bien conservada en unas cuestas próximas al río Pisuerga; donde se asegura que hubo castillo, así como un puente y un molino de varias piedras. El templo de Santa Juliana, es en la actualidad la iglesia de la aldea de San Cebrián de Buena Madre, antigua aldea dependiente de Valbuena, donde se localiza la soberbia y bien conservada fábrica del Palacio fortaleza de los Múgica, de cuyos históricos propietarios se conservan sus sepulcros renacentistas con estatuas yacentes dentro de la mencionada iglesia. A menos de tres kilómetros de Valbuena de Pisuerga, en la parte alta de un feraz y acogedor valle bien poblado de encinas y de algunos enebros, se ubican las exiguas y expoliadas ruinas de lo que fuera el priorato de la Granja o de la Quinta.